Rusia redobla su propuesta para equipar a la Fuerza Aérea Uruguaya con el Yak-130

Se trata de la versión modernizada del avión de entrenamiento y combate Yak-130. Tal y como supimos adelantar desde Zona Militar anteriormente, las necesidades de modernización de las flotas aéreas de las Fuerzas Armadas a nivel regional, no han sido ignoradas. Particularmente en Uruguay, el candidato para el reemplazo de los A-37 Dragonfly y los ya retirados IA-58 Pucará de la Fuerza Aérea Uruguaya es el avión de entrenamiento y combate Yak-130, ofrecido por los rusos hace ya varios años. 

 

Lo cierto es que, el ofrecimiento sigue en pie, y en esta ocasión con un Yak-130 modernizado respecto a la versión principal: 

- Posee instalado un radar a bordo, el cual no esta incluido en la versión base 

- Los equipos aeronáuticos y los sistemas han sido modernizados 

- Posee el montaje del kit de equipos de radiocomunicación, incluyendo dos plantas de radio 

- Ampliación de la nomenclatura de los medios de destrucción aéreos, guiados y no dirigidos 

- Pod de detección óptica colocado en barquilla 

- Implantación del complejo de autodefensa de a bordo 

 

Además, a diferencia de la versión base, el armamento de la aeronave también posee diversos cambios: 

- Misiles guiados de corto alcance RVV-MD 

- Misiles guiados de mediano alcance RVV-SD 

- Pod EO/IR para detección y adquisición de blancos 

- Bombas guiadas K08BE, KAB-500OD, KAB-500SE, KAB-250LG-E 

- Contenedor de cañón unificado UPK-23-250 con el cañón GSh-23L 

- Pod de sistema de autodefensa del avión con la estación de interferencias activas SAP-BKO 

- Tanques de combustible externos PTB-500 

 

La versión modernizada del Yak-130 permite su empleo de combate en condiciones meteorológicas normales, nocturnas, con meteorología adversa y en zona montañosas, garantizado a su vez por el radar de a bordo, a diferencia de la versión base. Dicho radar como principales características importantes permite la búsqueda, detección y seguimiento automático de los blancos aéreos y de objetivos en el mar; búsqueda rápida y enganche automático de los blancos visibles en los regímenes del combate aéreo cerrado (dogfight); y ataque a los objetivos navales de superficie mediante las armas guiadas y no dirigidas. 

 

A su vez, el radar en el modo aire-aire permite la detección y el seguimiento automático de los objetivos aéreos y sobre el mar; estando asociado al sistema de tiro del cañón SNPU-130 interno y del cañón en barquilla. En el modo aire-superficie, por otra parte, permite la detección de blancos inmóviles sobre la superficie, del tipo destructor, lanchas rápidas o puente ferroviario así como la detección de blancos móviles dentro de la categoría de vehículos blindados y ligeros.

 

Fuente: https://www.zona-militar.com/

 

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