La Fuerza Aérea acelera la producción de una bomba de precisión apodada ‘el francotirador más preciso del mundo’

La Fuerza Aérea de Estados Unidos está acelerando la producción de la bomba BLU-129 lanzada desde el aire y guiada con precisión, a esta nueva capacidad cada vez más demandada por los militares en zona de guerra, se la considera como: precisa, letal y exacta, y se la denomina el francotirador más preciso del mundo. El arma, descrita como una bomba de fibra de carbono adaptable, está especialmente diseñada para controlar los “efectos de campo” y crear un daño colateral muy bajo como resultado de los ataques aéreos. “La Fuerza Aérea está produciendo actualmente cuerpos de bombas BLU-129 para atender la fuerte demanda operativa”, ha manifestado el Capitán Hope Cronin, Portavoz de la Fuerza Aérea.

La BLU-129 está cada vez más solicitada porque, entre otras cosas, es capaz de adaptar rápidamente su carga explosiva en función de la amenaza, utilizando lo que se llama efectos de rendimiento variable. Los efectos de rendimiento variable permiten a los atacantes ajustar la potencia explosiva durante el vuelo, lo que en algunos casos, permite realizar ataques extremadamente efectivos, y estrechamente precisos. “Pese a la demanda, hay un número limitado de esta arma, y ​​queremos mantenerla para aquellas misiones que solo necesitan tener esa capacidad”, ha señalado el Coronel Gary Haase, del Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea (AFRL), en una entrevista realizada el pasado otoño en un simposio de la Asociación de la Fuerza Aérea. El desarrollo de lo que los ingenieros de la Fuerza Aérea llaman seleccionabilidad de vuelo es un elemento esencial de esto, ya que permitirá que los objetivos de combate dinámicos se adapten mientras el avión está en el aire. Esto se puede hacer con una serie de tecnologías para permitir una mayor precisión con energía multimodo y estructuras especializadas diseñadas para la ojiva.

La BLU 129 se describe como una innovación llamada diseño de efectos adaptados con un radio letal contenido, pero con una capacidad destructiva precisa y sustancial. “Esto permite un tamaño muy reducido de ojivas con la misma capacidad de destrucción”. La producción acelerada del BLU-129 representa un elemento importante de una iniciativa en curso de la Fuerza Aérea para aumentar la flexibilidad de los ataques dentro de una ojiva individual ajustando el tiempo, el efecto de la explosión y la detonación. Aerojet Rocketdyne, proveedor que fabrica parte de la carcasa de las ojivas, proporciona algunos detalles técnicos sobre la forma en que el arma logra su precisión. “Estas armas utilizan la construcción de la carcasa de la ojiva, fabricada con fibra de carbono. El cuerpo de la bomba enrollado en fibra de carbono se desintegra en lugar de fragmentarse, lo que añade fuerza explosiva, pero reduce el daño colateral”, explica Aerojet Rocketdyne. 

Este tipo de avances técnicos, en los que las municiones pueden ajustarse en vuelo, está inspirando un nuevo pensamiento cuando se trata de Conceptos de Operaciones (CONOPS). Los nuevos objetivos y las variaciones en la producción de explosivos cambian naturalmente los tipos de misiones de ataque que caen dentro del ámbito de lo posible. Por ejemplo, las circunstancias de combate son muy rápidas, a menudo cambian dramáticamente en minutos, incluso en segundos. Por esa razón, los efectos adaptables sincronizan mejor los ataques con la inteligencia, el reconocimiento y la vigilancia, permitiendo a los pilotos acelerar la cadena de destrucción y tomar decisiones más rápidas mientras rastrean los objetivos en movimiento, explican los principales desarrolladores de armas de la Fuerza Aérea. Hasse explica que la BLU-129 aporta elementos adicionales de flexibilidad de ataque porque en lugar de viajar con dos bombas muy grandes y pesadas, un piloto puede simplemente dejar caer cuatro BLU-129 sobre un objetivo para aumentar el efecto de la explosión y evitar daños colaterales. (Jesús.R.G.)

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