El Ejército Colombiano ha
adquirido tres nuevos cañones Nexter LG-1 MK-III de 105 milímetros,
dentro del proceso de compra de un número importante de estas piezas de
fabricación francesa. El contrato fue firmado a finales del pasado mes
de septiembre, por un monto aproximado de 7,5 millones de dólares, en un
acuerdo de compra entre los gobiernos colombiano y francés. Colombia
cuenta actualmente con 20 piezas de este modelo, y su intención es la de
adquirir por lo menos tres baterías mas, para renovar así parte
importante de su parque de cañones de 105 mm.
En el marco de un primer pedido por 20
cañones, por un monto de 32 millones de dólares, en septiembre de 2010
el Ejército recibía su primer lote de obuses LG-1 Mk III del tipo
Howitzer de 105 mm., siendo destinados al Batallón de Artillería N º 10
de Santa Bárbara, en la localidad de Buenavista (Guajira), formándose
cinco sub-grupos nuevos de baterías de cañones. El obús remolcado
Nexter LG-1 Mk-III, de 1520 kg de peso, equipado con un navegador
inercial Kearfott Corporation KN-4051, está especialmente adaptado para
su uso por fuerzas de despliegue rápido en terrenos de difícil acceso.
Este arma ligera, que puede ser transportada por vía aérea en
helicóptero, se ha desempeñado con buen resultado en Afganistán y
responde muy bien a los requerimientos de los escenarios en que se
desenvuelve el Ejército colombiano.
Fuente: http://www.defensa.com/
Considero conducente, pertinente y util un debate de control politico en la Comisión Segunda del Congreso para que el Ejercito Colombiano explique porque a pesar de las fallas y fisura que presentan estos equipos se insiste supinamente en adquirirlos poniendo en riesgo la vida de los nuestros Heroes de la patria...!
ResponderEliminar