Cómo podría movilizarse el ejército estadounidense si Rusia invade Ucrania.

 
El desembarco de paracaidistas estadounidenses en el Báltico, el envío de caballería y artillería desde Alemania y la concentración de una brigada blindada. Estos son algunos de los movimientos que el Mando Europeo de Estados Unidos podría hacer para reforzar el flanco oriental de la OTAN si Rusia invade Ucrania, según los analistas. También habrá presiones para que la OTAN active su poco utilizada fuerza punta de lanza de reacción rápida, una unidad creada en respuesta a la intervención rusa en Ucrania en 2014, para mostrar la unidad aliada. “Esta fuerza (de la OTAN) fue construida precisamente para este tipo de crisis”, dijo John R. Deni, un experto en seguridad europea de la Escuela de Guerra del Ejército de Estados Unidos. “Es una fuerza representativa de muchos de los aliados. Así que no utilizarla ahora, francamente, corre el riesgo de socavar la solidaridad de la OTAN”. Aunque no es seguro que el presidente ruso Vladimir Putin vaya a lanzar una nueva invasión de Ucrania, lo que sí ha quedado claro es que habrá una respuesta militar aliada de algún tipo en el territorio de la OTAN si se produce un ataque. 
 
El asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, manifestó el martes tras una reunión entre Putin y su homólogo estadounidense, Joe Biden, que Estados Unidos está preparado para fortificar a sus aliados de la OTAN en el flanco oriental. “¿Qué capacidades adicionales podemos proporcionar para garantizar que se sientan fuertes y seguros en su propia soberanía e integridad territorial?” dijo Sullivan. No especificó cuáles son las capacidades adicionales, pero expresó que están “sobre la mesa en esos países en caso de que Rusia actúe en Ucrania de forma más decisiva”. La cuestión ahora es qué tipos de maniobras militares podrían entrar en juego si la alianza de la OTAN liderada por Estados Unidos debe reforzar las defensas en Estonia, Lituania, Letonia y Polonia y Rumanía. El general retirado Philip Breedlove, que comandó el EUCOM y fue comandante supremo aliado de la OTAN entre 2013 y 16, declaró que la alianza está mejor posicionada ahora para responder a una crisis que en 2014, cuando Moscú se anexionó repentinamente la península ucraniana de Crimea. 
 
“La conclusión es que hicimos algunos buenos cambios en la OTAN, y tenemos que seguir terminando lo que empezamos”, mencionó Breedlove. Se negó a ofrecer una receta sobre cómo deben movilizarse exactamente las fuerzas estadounidenses y aliadas si se produce otra invasión de Ucrania. Pero sí dijo que “es necesario un cambio en la preparación”. La respuesta inicial del EUCOM a la intervención rusa en Ucrania en 2014 ofrece una indicación de lo que podría hacer en una segunda ocasión, en particular, reforzando la vigilancia aérea en el Báltico con los F-16 de la Fuerza Aérea y lanzando en paracaídas a los soldados de la 173ª Brigada Aerotransportada en Polonia y el Báltico. La rápida movilización se centró en asegurar a los aliados y disuadir la agresión rusa. Los convoyes de carretera posteriores de alto perfil del 2º Regimiento de Caballería, con base en Vilseck (Alemania), también formaron parte de la respuesta del Ejército entonces. 
 
Deni manifestó que cabe esperar movimientos similares si los aliados tienen que responder una vez más. Sin embargo, a diferencia de lo que ocurría hace siete años, el ejército estadounidense ya no está en declive en el continente, lo que da al EUCOM más fuerzas entre las que elegir. “Ciertamente, no teníamos todo lo que necesitábamos (en 2014)”, dijo Breedlove. “Afortunadamente, desde aquellos días, nuestras fuerzas no han hecho más que crecer en Europa, así que eso es algo bueno”. Por ejemplo, en 2014, no quedaban tanques del Ejército en Europa. El último de los carros de combate principales M-1 Abrams del Ejército salió de Alemania exactamente un año antes de la anexión de Crimea por parte de Rusia. Ahora, una brigada acorazada estadounidense rotativa está posicionada en Europa todo el año. El EUCOM también podría optar por concentrar en el Báltico las fuerzas blindadas, que suelen estar dispersas a lo largo del flanco oriental, si quisiera fortificar las defensas en un movimiento de reafirmación, expresó Deni. 
 
Además, el Ejército ha añadido capacidades de aviación y ha incorporado nuevas unidades de artillería, con base en Alemania, que podrían ser enviadas al Báltico y a Polonia en misiones de seguridad. Una nueva Fuerza de Tarea Multidominio en el cuartel general del Ejército de Estados Unidos en Europa y África, lanzada en septiembre, también podría ser un factor en los planes de refuerzo en el este, dijo Deni. Esta unidad tiene por objeto reunir las capacidades de lucha no convencionales en el ámbito electrónico. Un área de incertidumbre es cuánto más estarán dispuestos a hacer los Estados miembros de la OTAN. La Alianza ya cuenta con cuatro grupos de combate multinacionales en el Báltico y en Polonia que se formaron para servir de disuasión a la agresión rusa. Estas unidades estarían probablemente en alerta máxima en caso de un ataque a Ucrania. También podría activarse la fuerza de punta de lanza de la OTAN, de 5.000 soldados, conocida formalmente como Fuerza de Tarea Conjunta de Muy Alta Disponibilidad. 
 
La intervención de esta unidad, formada por fuerzas de países aliados, pondría de manifiesto la unidad de la alianza. “Todo esto se basará en una petición de los aliados. Si vemos que acuden a la OTAN y piden ayuda y no la obtienen a tiempo, creo que veremos a Estados Unidos actuar de forma bilateral”, dijo Deni. “Tengo la sensación de que (los Estados bálticos y Polonia) quieren más botas estadounidenses sobre el terreno, y punto. Tengo la firme sospecha de que ese deseo aumentará, no disminuirá”. Sin embargo, no está claro si todos los aliados estarían de acuerdo, según los analistas. “El principal problema parece ser que, una vez más, algunos aliados de la OTAN tienen una percepción diferente de la amenaza que supone Rusia y una reticencia a enfrentarse a Putin”, declaró Jorge Benítez, experto de la OTAN en el think tank Atlantic Council de Washington. En la propia Ucrania, las tropas de la Guardia Nacional de Estados Unidos y los equipos de operaciones especiales están estacionados en una misión de entrenamiento. 
 
Están posicionados lejos del conflicto en curso con los separatistas apoyados por Rusia en el este del país. Y no hay ninguna señal de que el Pentágono quiera añadir entrenadores. Tal movimiento podría ser visto como una escalada por parte de Rusia. Pero el martes, Sullivan dijo que Washington está dispuesto a proporcionar material defensivo adicional a los ucranianos más allá de los 2.500 millones de dólares en asistencia de seguridad dados desde 2014. Estados Unidos ha proporcionado jabalinas antitanque, lanchas patrulleras armadas, radares contra la artillería y sistemas aéreos no tripulados. “Tenemos una tubería en curso que entrega varias formas de asistencia defensiva a Ucrania”, dijo Sullivan. “Si esa tubería necesita suplementos adicionales a medida que avanzamos dependerá de cómo evolucionen las circunstancias”. 
 
Fuente: https://israelnoticias.com/
 
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