Rusia empieza a desarrollar defensas contra misiles hipersónicos.


El Ministerio de Defensa de Rusia ha decidido desarrollar un nuevo sistema de misiles de intercepción de largo alcance multipropósito que incluso será capaz de interceptar armas hipersónicas, informa Izvestia, citando fuentes del ministerio. La agencia de noticias escribe que, a petición del departamento militar, ya se ha realizado un trabajo teórico sobre un misil aire-aire de súper largo alcance con una ojiva divisoria, y actualmente se está trabajando para determinar las características y la composición del futuro sistema. 

Uno de los candidatos que se está considerando es el futuro misil aeronáutico de alcance intermedio K-77M (como ojiva). El plan consiste en que una aeronave dispare una “munición especial” de largo alcance con varios misiles aire-aire en dirección al objetivo. En un determinado momento, la munición lanzará los misiles separados, que luego se acercarán y atacarán el objetivo, aunque sea hipersónico. El uso de varios misiles, en lugar de uno, está diseñado para mejorar la probabilidad de destruir el objetivo. El súper largo alcance de las municiones ampliará el alcance letal efectivo del arma. 

De acuerdo con la información disponible, es probable que Rusia utilice aviones interceptores MiG-31BM para transportar el nuevo sistema de misiles. En una etapa posterior, estos serán reemplazados por el futuro MiG-41 u otros cazas. En la actualidad, el proyecto podría parecer inverosímil o carente de perspectivas. Sin embargo, Rusia ya tiene armas hipersónicas, y otros países las adquirirán pronto. Los medios de comunicación rusos parecen confiar en que, puesto que Rusia fue capaz de desarrollar un arma hipersónica, también podrá desarrollar una protección contra esas armas, aunque ésta no adopte la forma prevista actualmente.

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