Fruto
de la reducción de presupuesto para mantenimiento, los ejércitos se
están viendo obligados a prescindir de algunos de sus sistemas, optando
por proceder a su almacenaje de forma ordenada. Es el caso del Ejército
de Tierra que, según fuentes del Mando Logístico del Ejército, ha
ordenado hibernar, durante cinco años, un conjunto de 53 carros de
combate Leopardo 2A4 procedentes de la Brigada de Infantería Mecanizada
"Extremadura" XI, de Badajoz y de la Brigada de Infantería Ligera "San
Marcial" V, en el País Vasco. Así, los Leopardo permanecerán
almacenados en las instalaciones de la localidad de Casetas, en
Zaragoza, de la Agrupación de Apoyo Logístico, AALOG nº 4, según ha
informado el Boletín Tierra.
Las claves para que los carros de combate no se deterioren
En el caso de los carros de combate, al igual que ocurre cuando se deja aparcado un coche durante muchos meses, algunos de sus elementos mecánicos y, sobre todo, eléctricos y electrónicos pueden deteriorarse. En concreto, los elementos más sensibles a la humedad y la corrosión son el motor y la barcaza, así como los principales equipos electrónicos, lo que exigen un tratamiento específico antes de su almacenamiento.
Además, no se descarta que algunas de estas unidades sean utilizadas en los próximos años para abaratar el coste de otros programas, de momento parados por su alto coste, transformando los Leopardo en carros de zapadores y en vehículos de lanzamientos En principio, se trata de una experiencia piloto que el Mando de Apoyo Logístico no descarta que se realice con otros sistemas y materiales que actualmente, por falta de presupuesto para carburante y mantenimiento, no se están usando. De cualquier forma, a partir de 2013, el Estado Mayor del Ejército analizará y decidirá el plan de almacenamiento definitivo de este y el resto de los materiales actualmente sin usarse.
Por su parte la Armada también ha puesto otro plan similar en el que no descarta dar de baja, de forma anticipada, al portaviones Príncipe de Asturias por falta de presupuesto para tenerlo operativo. De hecho, según los Presupuestos Generales del Estado, actualmente tramitándose en el Congreso, la Armada ha visto reducido su capítulo destinado a mantenimiento en más de 50 millones de euros respecto al año pasado, y que afectará sobre todo a la Flota, trabajando de forma conjunta con la Jefatura de Apoyo Logístico. Además, durante este año y principios de 2013 se darán definitivamente de baja varios buques como el anfibio Pizarro o el patrullero Chilreu. Otros vehículos y buques también entrarán dentro de este plan de recorte de gastos, procediendo a su mantenimiento mínimo para poder estar operativos de nuevos cuando se disponga de presupuesto.
Fuente: http://www.revistatenea.es/
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