Un general desertor de Siria afirma que existen planes para usar las armas químicas o transferirlas a Hezbolá.

 

El presidente sirio Bashar Assad ha elaborado planes para transferir armas químicas a Hezbolá, ha dicho un general desertor que antes estaba a cargo del arsenal masivo de productos químicos del país. El General de División, Adnan Sillu, quien desertó del régimen de Assad hace tres meses, dijo al Times (de Londres) que Damasco también tenía planes para utilizar las armas en su batalla contra las fuerzas rebeldes que buscan derrocar a Assad. El tema del arsenal de armas químicas de Siria, considerado el tercero más grande del mundo, ha desconcertado a los funcionarios occidentales e israelíes, que temen que las armas caigan en manos de terroristas o sean desplegadas dentro de Siria. 

Aunque Occidente ha rechazado las presiones para intervenir en el conflicto de 18 meses, que se ha cobrado más de 20.000 vidas, el presidente Barack Obama recientemente dijo que la transferencia de armas químicas sería una "línea roja" que Washington no toleraría. La transferencia de armas químicas a Hezbolá sería un verdadero elemento de cambio en las relaciones de Israel hacia el grupo terrorista, que controla gran parte del sur del Líbano y que se enfrentó en una guerra a Israel en 2006. Las autoridades han insinuado que Israel podría tomar medidas antes de dejar que esa transferencia tuviera lugar. Sillu dijo al diario que Siria se había abstenido de tomar tal medida por temor a las consecuencias en el ámbito internacional, pero ahora no tenía nada que perder. 

"Si estalla una nueva guerra entre Israel y Hezbolá, esto sólo ayudará al régimen sirio", dijo. Se han multiplicado los informes del movimiento o las pruebas de armas químicas mientras el control de Assad sobre Siria se ha vuelto más tenue. El lunes, el semanario alemán Der Spiegel informó de que, en agosto, el régimen, con la ayuda de asesores iraníes, había probado armas que podrían llevar cabezas químicas. Según Sillu, durante el verano los altos funcionarios del régimen llevaron a cabo una reunión al sur de Damasco para discutir el uso de armas químicas contra los rebeldes. El plan incluía gasear a los combatientes de la oposición y a los civiles que los apoyan en Aleppo, la ciudad más grande del país. El régimen ha estado librando una batalla de meses de duración por el control de la metrópoli del norte, considerada una pieza clave en el control de Assad en el país. 

Fuente: http://www.laproximaguerra.com/