Japón pide presupuesto récord de defensa y presenta costoso destructor pese a estancamiento de economía.
La Fuerza de Autodefensa Marítima de Japón (FADM) presentó hoy un nuevo destructor con un valor de 735 millones de dólares en la Prefectura de Nagasaki, en la isla de Kyushu, suroeste de Japón, a pesar de los preceptos pacifistas de su Constitución y de la economía estancada que padece problemas de financiamiento. El buque recién construido de 5.100 toneladas, llamado "Asahi", entrará en servicio con las FADM en 2018. A la ceremonia de presentación asistió el alto viceministro de Defensa Kenji Wakamiya, junto con unas 1.300 personas.
El nuevo destructor comprende tanto un sistema eléctrico de propulsión
como un motor de turbina de gas, lo cual lo convierte en un poderoso
sistema eficiente en combustible tipo "híbrido", mejorando tanto el
rendimiento como en alcance del buque. El destructor, de 151 metros de eslora y más de 18 metros de manga,
también está equipado con tecnología de sonar para detectar submarinos,
indicaron observadores militares. Con un costo de 76.000 millones de yenes (735,37 millones de dólares)
para los contribuyentes japoneses, el destructor es una pequeña parte de
una creciente cuenta del Ministerio de Defensa de Japón, el cual para
el año fiscal 2017 ha solicitado un presupuesto récord, el quinto
incremento anual desde que el primer ministro Shinzo Abe retomó el cargo
en 2012. La asignación del presupuesto al Ministerio de Defensa representa un
aumento de 2,3 por ciento respecto a su distribución de este año y
totalizará más de 5 billones de yenes.
El gobierno, encabezado por Abe, continúa impulsando la expansión del
alcance de sus Fuerzas de Autodefensa en el país y en el exterior, y
para lograrlo presiona para enmendar la Constitución, a pesar de la
amplia oposición y condena pública nacional e internacional. El nuevo presupuesto de defensa se destinará principalmente a mejorar
los sistemas de defensa antimisiles e interceptores, a la adquisición de
un nuevo submarino con capacidades de vigilancia avanzadas, y a la
compra de bombarderos espías de próxima generación, además de cubrir los
costos de más personal. El gasto del gobierno en defensa continúa aumentando de forma
desproporcionada a pesar de que el gobierno lucha por financiar los
crecientes costos de bienestar social. Por si eso fuera poco, el país
continúa envejeciendo rápidamente y la población disminuye, a la vez que
lucha con una deuda pública de más de 240 por ciento del tamaño de su
economía y con décadas de deflación.
La solicitud de presupuesto del ministerio también incluye 105.600
millones de yenes en gasto para la modernización de sus sistemas de
defensa antimisiles tierra-aire PAC-3. El ministerio espera poder
ampliar el rango de los misiles, así como su precisión, a tiempo para
las Olimpiadas de Tokio 2020. Por otra parte, el presupuesto define planes para que el ministerio
obtenga sistemas interceptores de misiles que serán desarrollados de
manera conjunta entre Japón y Estados Unidos por un monto de 14.700
millones de yenes y las actualizaciones necesarias de los destructores
Aegis sobre las cuales son desplegados. La construcción de un nuevo submarino con capacidades de vigilancia
superlativas, señaló el Ministerio de Defensa, también está siendo
incluida en el presupuesto, con un costo de 76.000 millones de yenes. Otro equipo que destaca en la lista de compras del ministerio incluye
seis aviones de combate Lockheed Martin F-35, que requerirá de alrededor
de 95.000 millones de yenes, además de otras asignaciones para
vehículos aéreos no tripulados (UAVs).
En términos de asignaciones de salarios para la mayor cantidad de
personal, el Ministerio de Defensa está buscando 74.600 millones de
yenes para reforzar algunas de las islas del sur de Japón, así como
fondos para establecer una nueva unidad anfibia en la prefectura de
Nagasaki, la misma ubicación del lanzamiento del "Asahi" el miércoles. Abe está decidido a ampliar la esfera de operación de la FADM de Japón
con una decisión unilateral a nivel del gabinete para reinterpretar la
Constitución pacifista de Japón, pese a la oposición del público y de la
comunidad internacional. La Constitución, por la que todavía se guía la nación, instituida
después que Japón perdiera la Segunda Guerra Mundial, prohíbe que Japón
mantenga cualquier potencial de guerra o que use la fuerza como un medio
para solucionar disputas internacionales. También decreta de manera inequívoca que el pueblo japonés renuncia para siempre a la guerra. (Jesús.R.G.)
Fuente: http://cazasyhelicopteros2
rusia tambien tiene estacamiento economico y eso no le impide destinar dinero en defensa. la economia de japon es cinco veces mas grande que la de rusia y eso que es un pais pequeño.
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