El vicealmirante ruso ha dejado claro que los vectores fundamentales del mando naval siguen siendo los mismos: construcción de la serie de destructores de propulsión nuclear clase Líder; submarinos de ataque de propulsión con independencia del aire –es decir aquellos que permiten a un submarino operar sin la necesidad de emerger a la superficie o tener que usar el sistema snorkel para acceder al oxígeno de la atmósfera–; y seguir desarrollando el portaaviones de propulsión nuclear clase Shtorm.
Apuesta por los Líder
Dejando al margen el proyecto de fabricación de nuevos portaaviones, todavía no incluido en el programa estatal de adquisiciones, el nuevo destructor nuclear del proyecto 23560 Líder es el principal capítulo en la construcción naval de buques de superficie.
Dejando al margen el proyecto de fabricación de nuevos portaaviones, todavía no incluido en el programa estatal de adquisiciones, el nuevo destructor nuclear del proyecto 23560 Líder es el principal capítulo en la construcción naval de buques de superficie.
El barco se construirá siguiendo la tecnología de sección radar equivalente
'stealth' reducida: forma 'geométrica' del casco, materiales
absorbentes de ondas de radares y las superestructuras y las armas
escondidas dentro del casco. La autonomía de los destructores
clase Líder estará limitada solo por las capacidades físicas de las
tripulaciones y las reservas de víveres. Varios analistas destacan
que la potencia de la planta propulsora nuclear de los Líder haría a
estos destructores equiparables por sus capacidades 'energéticas' con el
más avanzado destructor estadounidense clase Zumwalt: es decir, permitiría instalar en los destructores rusos cañones electromagnéticos (cuyos desarrollos se llevan a cabo en Rusia) y armas láser.
Submarinos de propulsión anaeróbica o 'silencio' casi total
Elementos tecnológicos de propulsión anaeróbica ya han sido aplicados en los submarinos de ataque tipo Severodvinsk del proyecto 885 Yasen, los cuales ya disponen de planta auxiliar de propulsión de este tipo.
Elementos tecnológicos de propulsión anaeróbica ya han sido aplicados en los submarinos de ataque tipo Severodvinsk del proyecto 885 Yasen, los cuales ya disponen de planta auxiliar de propulsión de este tipo.
Se
estima que la primera planta de propulsión independiente del oxígeno
sea desarrollada en dos o tres años. Su aparición aumentará
considerablemente el sigilo de los submarinos diésel-eléctricos y su
autonomía. Los primeros en recibir estos sistemas serán los
submarinos del Proyecto 677 Lada, que sustituirán a la actual flota de
submarinos de ataque del proyecto 636,3 Varshavianka. (Jesús.R.G.)
Fuente: https://actualidad.rt.com/
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